Londres.- Amnistía Internacional (AI) urgió hoy a las autoridades haitianas a tomas medidas "inmediatas y efectivas" para proteger de eventuales asaltos sexuales a las mujeres que viven en campos de refugiados tras el seísmo que azotó al país el pasado mes de enero.
Miles de mujeres alojadas temporalmente en los centenares de campos de refugiados organizados de forma espontánea tras el terremoto, están expuestas a la amenaza de la violencia sexual sin que las autoridades del país hayan puesto en marcha políticas para protegerlas, denunció AI en un comunicado.
Tras una visita de tres semanas al país, la investigadora del área del Caribe de Amnistía, Chiara Liguori, afirma que la violencia sexual "ya era un problema preocupante antes del seísmo" y que, con el desplazamiento de la población, "las mujeres y niñas están expuestas ahora a mayores riesgos".
La inseguridad, las aglomeraciones de personas y la inadecuada asistencia sanitaria incrementan los riesgos de asaltos sexuales en un momento en el que la "falta de capacidad" de las fuerzas de seguridad y del sistema judicial deja "sin castigo" a los autores de estos actos, dice el comunicado de la organización pro derechos humanos.
"Las autoridades haitianas deberían reforzar la presencia policial en los campos de refugiados, especialmente durante la noche, para proteger a las mujeres y atender los casos denunciados", defendió Liguori.
La ausencia de medidas de protección está desanimando a denunciar a las mujeres que sufren agresiones sexuales, muchas de ellas menores, según pudo constatar AI.
De las 19 mujeres violadas con las que contactó la organización, ninguna de ellas había denunciado la agresión a las autoridades y, ante el miedo a sus agresores optaron por cambiarse de campamento.
Liguori denunció que las víctimas de violencia sexual no tienen refugios a los que recurrir y que este tipo de servicios de apoyo a las mujeres violadas deberían ser contemplados por las ONG presentes en la zona en colaboración con las autoridades del país.
