El alto comisionado de los Derechos Humanos, Porfirio Rojas Nina, renunció este martes al cargo de manera irrevocable por presuntas diferencias con el presidente de la entidad Manuel María Mercedes.
Rojas Nina explicó que tomó la decisión molesta por la forma en que a su juicio viene manejando el organismo el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNHD), Manuel María Mercedes.
“Ha manejado la institución como si fuera de su propiedad, de manera unilateral. La Comisión de los Derechos Humanos ha perdido la esencia que le dieron origen”, sostuvo.
Se recuerda que Rojas Nina en el año 2008 renunció al cargo de asesor del Poder Ejecutivo en materia de Derechos Humanos.
Entre los fundamentos de su renuncia, entre otros, estaba que jamás podría percibir emolumentos o un simple sueldo, sin desempeñar ninguna función para el cargo que fuera creado, debido a principios éticos, morales y la dignidad que le impone los blasones de mi conciencia.
Rojas Nina negó hace poco que haya expresado apoyo a los excesos en que dijo a veces incurren miembros de la Policía Nacional, como afirmó el presidente de la CNDH, Manuel María Mercedes.
Dijo que los excesos sólo pueden ser justificados en caso de defensa propia comprobada.
“Jamás he dicho que apoyo el accionar de la jefatura policial en la violación de los derechos fundamentales. No lo he dicho”, afirmó.
Expresó que ha pedido varias veces al jefe policial, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, que castigue el uso injustificado de la fuerza por parte de los agentes policiales.