Las investigaciones para dar con el paradero de Sobeida Féliz Morel, vinculada al decomiso de 4.6 millones de dólares, prófuga de la justicia dominicana, aún no han sido cerradas, dijo este viernes el procurador Radhamés Jiménez Peña.
No obstante, sigue cobrando fuerza la versión que da cuenta que Féliz Morel salió del país rumbo hacia Madrid, España, el pasado jueves día 12 de este mes por el Aeropuerto Internacional de Las Américas.
Sobre la información de su supuesta salida, Jiménez Peña no da crédito a esta versión y dijo que existen muchas personas con este mismo nombre y que quizás por esos se ha puesto a circular la noticia.
En tanto, señaló que verifican las imágenes de video tomadas ese día por la cámara de seguridad de la terminal, y que éstas y otras evidencias son analizadas por el Buró Federal de Investigación de los Estados Unidos (FBI).
De acuerdo a una nota publicada este viernes por el vespertino El Nacional, las dudas sobre la salida de Féliz Morel, fueron despejadas.
Dice que las investigaciones de las últimas horas han demostrado que Sobeida salió de República Dominicana el 12 de este mes en un vuelo de Air Europa, que tenía como destino a Madrid. Al menos dos fuentes confirmaron a ese diario su salida.
En tanto, el director de Migración, vicealmirante Sigfrido Pared Pérez, insistió en que Féliz Morel no ha abandonado la nación.
El funcionario atribuyó a “un intruso” que supuestamente había violado el sistema de cómputos de Migración la inclusión del nombre de Sobeida Félix Morel (Félix, con X no con la Z escrita en el acta original), en la lista de pasajeros que salieron por el aeropuerto de Las Américas el jueves 12.
Sin embargo, una fuente afirmó que los investigadores llegaron a la conclusión, después de varias reuniones, de que Féliz Morel había salido del país, y que incluso así se lo habían informado al presidente Leonel Fernández.
Migración confirmó que en sus registros de salida figura el nombre de Sobeida Félix Morel en un vuelo a Madrid, pero no así en la llegada a la capital española. Eso hace suponer a los investigadores que pudo haber cambiado de documento dentro del avión, cosa que hacen con regularidad los que viajan de incógnito.