El procurador Radhamés Jiménez Peña ordenó el sometimiento a la justicia, a través de la Fiscalía del municipio de Montecristi, a los cinco oficiales de la Policía Nacional acusados de asesinar, en un supuesto intercambio de disparos, a Williams de Jesús Batista Checo y Cecilio Díaz (Manuel) vinculados al secuestro del joven Eduardo Antonio Baldera Gómez.
El hecho ocurrió el día 10 de octubre en el municipio de Villa Vásquez, Montecristi.
El sometimiento se hizo por recomendación de la comisión que investigó las circunstancias en que fueron muertos los dos hombres, quienes fueron entregados vivos por comunitarios a los agentes policiales.
Los policías que actuaron en el confuso incidente son el teniente coronel Alberto Trejo Pérez; el mayor Jesús Rafael Tejada; el mayor Franklin Santana Martínez, y los segundo teniente José Luis Peralta Valentín y Catalino de Jesús Pérez, todos de la Policía Nacional.
Además, la comisión recomienda el sometimiento del alférez de fragata de la Marina de Guerra, Ramirito Dume Nina, por su presunta violación a los artículos 59 y 60 del Código Penal, en calidad de cómplice de la muerte de Cecilio Díaz, al cual recibió vivo de parte de los moradores de la sección Los Conucos de Villa Vásquez.
Igualmente, pidió sanciones administrativas y traslados para los sargentos de la Marina de Guerra, Víctor Manuel Féliz Féliz, Edgar López López y Javier José Heredia, por haberles mentido a la Comisión Investigadora, integrada por el procurador adjunto, Ramón Arístides Madera Arias, la procuradora fiscal del Distrito Judicial de Montecristi, Clara Jacqueline Zapata Santos y al mayor general de la Policía, Vinicio Hernández Méndez.
El informe fue presentado en rueda de prensa en la Procuraduría General de la República y, de inmediato, el procurador Jiménez Peña, lo remitió a la magistrada Zapata Santos, fiscal de Montecristi, para que proceda al sometimiento de los implicados en los asesinatos.
Al presentar la investigación, Madera Arias explicó que los cinco oficiales siempre han negado las versiones sobre las muertes y, en todos los casos, han afirmado que fueron atacados por una turba de delincuentes y se vieron obligados a disparar.
Los investigadores también entregaron, junto al informe, la suma de RD$5,000, que fue devuelta por el señor Lino Socio González Morel, alcalde pedáneo de la sección Sabana Cruz de Villa Vásquez, quien dijo que se lo regaló un coronel de apellido García Lebrón, como agradecimiento por el apresamiento de William de Jesús Batista Checo.
Según el informe de la comisión investigadora, los miembros de la patrulla, quienes supuestamente dispararon contra Cecilio Díaz y Batista Checo, cometieron una serie de violaciones a la normativa procesal penal de la República Dominicana, lo que fortalece la tesis de que no hubo intercambio de disparos.
Esa aseveración se determina porque los agentes actuantes no hicieron entrega de los secuestradores al representante del Ministerio Público, ni informaron sobre el arresto de los mismos, después de haberlos recibidos vivos por moradores de las secciones Sabana Cruz y Los Conucos de Villa Vásquez.
La patrulla tampoco informó al Ministerio Público sobre la ocurrencia del presunto intercambio de disparos, ni sobre la muerte de los Cecilio Díaz y Batista Checo, con lo que violaron el artículo 227 del Código Procesal Penal.
Asimismo, ni los representantes del Ministerio Público de Montecristi, ni el médico legista de esta cuidad participaron en el levantamiento de de los cadáveres.




