La Asociación de Tiendas de Zonas Francas de la República Dominicana (ATZRD) acusó Aeropuertos Siglo XXI (AERODOM) de evadir su responsabilidad y ejercer presión sobre la justicia, para conseguir un fallo adecuado a sus propósitos y así eliminar los negocios tradicionales que operan en las terminales del país.
La ATZRD respondió una información donde Andrew O’brine, gerente general de AERODOM, afirmaba que los trabajos de remodelación de los aeropuertos de Puerto Plata y Las Américas estaban paralizados por una litis con las tiendas de zonas francas.
“Las tiendas y las cafeterías miembros de esta Asociación nunca se han opuesto, ni constituyen un obstáculo para una remodelación, la cual creemos necesaria y hace tiempo se debió afrontarse”, sostienen los comerciantes.
La asociación ha pedido, en varias ocasiones, la remodelación de sus espacios y les ha sido negada por la gerencia de AERODOM; “en cambio, ellos han beneficiado a su filial Dufry, permitiéndoles la instalación de nuevas mega-tiendas donde se supone está pendiente de remodelación (como es el satélite de la terminal A de Las Américas)”.
Los comerciantes afirman que “estamos ahora, como siempre, en disposición de intentar llegar a una negociación clara y respetuosa, con el fin de que los usuarios de los diferentes aeropuertos se beneficien de terminales modernas y cómodas”.
Entre los negocios firmantes de un documento que le hicieron llegar a la gerencia de AERODOM están: Tienda Sol y Luz, Tienda T.P.M. Limited, Tienda Ritana, Tienda Bombón, Tienda La Choza, Tienda Yarey, Tienda Yoly y Tienda Cristian.
Además, Tienda Francis, Tienda Natasha Sánchez, Tienda Alfonso, Tienda Boleto, Tienda Mi Quisqueya, Tienda Capriles, Tienda Di Carlo, Carolina Fast Food, Caribean Coffe, Bocata Snack Bar, Tropic’s Snack Bar, Mosphere Snack Bar y Deli Gourmet.
Anteriormente, los miembros de la Asociación de Tiendas de Zonas Francas denunciaron que el Grupo Hazoury, antiguos administradores de los aeropuertos, no invirtió un centavo de sus bolsillos en las terminales del país, violando los contratos suscritos con el gobierno dominicano y la Ley de Concesiones.
Agregaron que con la venta de la concesión de los aeropuertos, los Hazoury, propietarios de los Aeropuertos Siglo XXI (AERODOM), por un valor superior a los 360 millones de pesos, además no pagaron impuestos al Estado dominicano.
Indicaron que pagan, sin falla, el dinero que le corresponde a las concesionarias y al gobierno, por ocupar los locales de los aeropuertos, sin embargo, AERODOM y los nuevos concesionarios, quieren que abandonen sus locales.
Mexicanos tienen monopolio
La Asociación de Tiendas de Zonas Franca de los aeropuertos denunció que el grupo Dufry Limited, filial de los concesionarios de las terminales del país, tienen un monopolio en los aeródromos y buscan ampliar su rango de ganancia obligándolos a abandonar sus negocios.
Comerciantes de las zonas francas de las terminales aéreas explicaron que el monopolio se da porque la empresa que administra la mayoría de los negocios, Advent Internacional y la concesionaria de los aeropuertos, Dufry Limited, es propiedad de los mismos accionistas.
Explican, además, que cuando se privatizaron los aeropuertos, en los años 90, el propio AERODOM, comenzó una cacería contra los que ocupaban los negocios en las terminales aéreas.
Dijeron que llevan más 30 años operando en los aeropuertos; pero AERODOM está empecinado en administrarlo todo, incluyendo las zonas francas, razón por la cual, hace más de tres años, otorgó la venta parcial de los negocios a Advent Internacional, por 42 millones de dólares.
Informe Comisión Diputados sobre Contrato AERODOM
La comisión de diputados que estudió el contrato de compraventa de las acciones de AERODOM a la empresa Advent Airport Dominicana, sugirió que se investigue esa negociación en su totalidad y el pago de impuestos por ganancia de la venta de capitales.
Los legisladores pidieron el pago total del Impuesto Sobre la Renta (ISR) dejado de percibir hasta la fecha, más las penalizaciones y mora por el tiempo transcurrido desde el momento en que se generó la obligación tributaria y se hiciera exigible la misma.
El Estado dominicano en ningún momento conoció o avaló la venta de acciones de AERODOM, y ninguna de las enmiendas hechas al contrato (3) han sido conocidas por el Congreso Nacional.
Sobre las enmiendas, el contrato original que se firmó entre la Comisión Aeroportuaria y AERODOM dice: “ningún tipo de transformación o venta puede hacerse sin el consentimiento del Estado dominicano y sin la aprobación del Congreso”.
En ese orden, el artículo 16 del contrato expresa: “bajo ninguna circunstancia, la persona que tiene la concesión podrá vender o hacer otro tipo de negocio sin el conocimiento del Estado dominicano”.
También existe la falta de pago de los impuestos por la ganancia de capital, generado a razón de las ventas de las acciones de AERODOM.
Además, existe el desorden de la tasa aplicada por el aeropuerto a los fletes aéreos, ya que pese al decreto que reduce de seis centavos de dólar a dos, el pago por libra de carga exportada, se sigue cobrando los seis centavos.
Asimismo, una tasa de US$1.25 que se cobra para Seguridad Aeroportuaria, que aunque es cobrada, nunca se le ha reconocido al Cuerpo Especializado de Seguridad Aeroportuaria (CESA).
Otra anormalidad es el pago de los impuestos por venta de las acciones, ya que ninguno de los adéndum hechos posteriormente al contrato tampoco habla de exoneración de puestos a las ganancias de capitales.
El artículo 10, numeral 10.1, literal a) del Contrato de Concisión de fecha 7 de julio de 1999 y sus posteriores addendas, no conceden exención impositiva en el aspecto, o que constituye una estafa al Estado dominicano.
Se habla de una auditoría practicada al contrato cuando era presidente de la Junta Aeroportuaria, Víctor Díaz Rúa, quien cuando fue interpelado dijo desconocer la negociación.
Se trata de un contrato viciado, sin aprobación del Congreso Nacional, que debe ser revisado o revocado, y que los aeropuertos sigan rigiéndose a lo loco, porque se desconoce el marco jurídico y la realidad para operar terminales aéreas.
En el aeropuerto de Puerta Plata, los pasajeros son sometidos a malos tratos, los conducen por callejones y lugares no apropiados, hasta llegar al avión, lo mismo pasa a la llegada.
La situación obedece a que la reconstrucción de la terminal aeroportuaria está a un 30%, pese a que los concesionarios dicen está a un 80%. También hay goteras por todos lados, poniendo en situación incomoda a los viajeros.
Tampoco se estableció en el contrato la inversión en los aeropuertos, llegando a ocho los meses en que al de Puerto Plata no se le invierte un peso.
La Comisión Especial de la Cámara de Diputados que estudió el contrato consideró que los aeropuertos deben pagar sus impuestos, revisarse los adéndum, ver si real y efectivamente han invertido, y porqué no pagan el dinero de la tasa que le corresponde al CESA.
Hace años que no pagan al CESA, lo que expone la seguridad de los pasajeros y las líneas aéreas, así como descuido en el mantenimiento, tanto en los aeropuertos de las Américas, en Arroyo Barril y el María Montez.
La situación indica que se está ante violaciones muy serias a un contrato tan importante como el manejo de los aeropuertos en República Dominicana.