Los resultados de la auditoría practicada por la Cámara de Cuentas a la Junta Central Electoral (JCE) hablan de irregularidades administrativas y financieras. También revelan debilidades en los registros de efectivo, en inversiones, activos fijos y cuentas por cobrar.
Asimismo, el informe de la auditoria detalla inobservancias a disposiciones legales, como la adjudicación de obras grado a grado, compras de bienes y servicios sin cotizaciones ni licitaciones e impuestos sobre la renta no retenidos.
Los resultados de la auditoría serán conocidos por el Pleno de la JCE en la sesión programada para realizarse el miércoles 14 de octubre.
Según los datos, en junio de 2009, la JCE tenía un monto ascendente a RD$12,000,000.00 como parte de un Fondo Especial de Contingencia para ser usado en las pasadas elecciones presidenciales y vicepresidenciales, y a más de un año todavía tiene pendiente de liquidar RD$322,751.89.
El organismo electoral invirtió en publicidad en el 2008, RD$246,280,213.60 por contratación directa, mediante órdenes de colocación con publicitarias, medios de comunicación y personas físicas.
En ese sentido, la JCE no exigió a sus proveedores la certificación de registro de proveedores del Estado establecido por la Ley de Compras y Contrataciones de Bienes y Servicios del Estado, y no dispone de ninguna herramienta de monitoreo de esa publicidad.
Igualmente, el informe señala que la JCE no dispone de un sistema de contabilidad patrimonial que le permita contabilizar oportunamente los eventos ocurridos que afecten la situación financiera de la entidad.
Además, que la JCE no prepara estados financieros, que realiza el estado de ejecución, presupuestaria y disponibilidad consolidada sobre la base del efectivo ingresado y los gastos pagados.
