La fiscalía de Invivienda libertó a Juan Ignacio Rosario, a pesar de ser apresado con una chilena para ser investigado por la rotura de una vivienda y el robo de una escopeta calibre doce en Hato Viejo II.
La sección de investigaciones criminales de la policía de Guerra sometió a Rosario por portar una chilena en el momento de ser detenido, en relación con un robo en la casa de la familia Hichez Santana.
El capitán Severino de Guerra, una vez que recibió la denuncia, inició las investigaciones para localizar la escopeta.
En el momento de ser detenido, Rosario tenía una chilena.
La familia Hichez Santana demandó al Fiscal de la Provincia de Santo Domingo, doctor Perfecto Acosta, una explicación sobre este hecho, porque esa persona fue sometida.
Además de Rosario, el capitán Severino detuvo un menor que al ser interrogado afirmó que Juan Ignacio Rosario, Gerea, Tonito, Efraín, Nando y otros, lo habían invitado a robarse la escopeta calibre 12 de la casa de la familia Hichez Santana.
Partiendo de los datos aportados por el menor, el capitán Severino procedió a investigar el robo, tomando las huellas dactilares para confrontarlas con las ya procesadas por la policía científica.
Una unidad de la policía científica se presentó a la residencia e investiga las huellas dejadas en la ventana por donde penetraron los que robaron la escopeta.
Tanto la familia Hichez Santana y los investigadores de la policía reaccionaron sorprendidos con la libertad de Rosario, toda vez que lo apresaron con una chilena y el menor lo menciona en la desaparición del arma.
