Madrid.- El 14 de julio de 1986, ETA cometió su atentado más sangriento contra la Guardia Civil al asesinar a doce agentes y causar heridas a otras 40 personas en la plaza de la República Dominicana, en Madrid.
La banda terrorista española ETA ha asesinado en su medio siglo de historia a 206 miembros de la Guardia Civil, incluidos los dos agentes muertos hoy en el último atentado de la organización, en Mallorca, en las Islas Baleares (este).
El atentado de hoy se produjo un día después de otro perpetrado la víspera por ETA en Burgos (centro-norte), contra la casa cuartel local de la Guardia Civil, con una furgoneta bomba con la que los terroristas dejaron 60 personas heridas de carácter leve.
La Guardia Civil, creada en marzo de 1844, es el único cuerpo policial español de carácter militar, perteneciente a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, y cuenta con 70.000 efectivos que tienen entre sus funciones la vigilancia de fronteras terrestres y marítimas, de carreteras, la lucha contra el narcotráfico y el terrorismo y la protección de la naturaleza.
El atentado de hoy, el primero en Mallorca con víctimas mortales, se produce un día antes de la fecha en que se cumplen cincuenta años del nacimiento la organización terrorista.
Se trata del noveno atentado de ETA en lo que va de año y eleva a tres el número de víctimas mortales causadas en 2009.
El anterior atentado mortal se produjo el 19 de junio pasado cuando una bomba lapa provocó la muerte del policía nacional Eduardo Antonio Puelles, en la localidad vasca de Arrigoriaga, provincia de Vizcaya (norte).
Juan Manuel Piñuel Villalón fue el último guardia civil asesinado por ETA, el 14 de mayo de 2008 en Legutiano (Alava, norte). En ese atentado con un coche-bomba resultaron además cuatro personas heridas, una grave y tres leves.
En los años 1980 y 1979 se registraron el mayor número de muertes en la Guardia Civil como consecuencia del terrorismo de ETA. En 1980 perecieron 31 miembros del Cuerpo y en 1979 murieron 23.
En 1986 murieron veintidós guardias civiles, todos ellos en acciones de ETA, que perpetró dos de los atentados más sangrientos de su historia contra este cuerpo mediante la explosión de dos coches-bomba en Madrid el 25 de abril y el 14 de julio.
El 25 de abril fallecieron cinco guardias civiles y otros cuatro resultaron heridos, al explotar un coche-bomba en la calle Juan Bravo, de Madrid, al paso de una patrulla del cuerpo armado.
El 11 de diciembre de 1987 ETA llevó a cabo otra acción terrorista contra la Guardia Civil, al explosionar un coche-bomba contra la casa cuartel de Zaragoza y causar la muerte de once personas, entre ellas tres guardias civiles.
Otra acción similar tuvo lugar contra la casa cuartel en Vich (Barcelona) en 1991, que causó nueve muertos, dos de ellos agentes de la institución policial.
La banda terrorista ETA, siglas de "Euskadi ta askatasuna" ("Patria Vasca y libertad"), fundada el 31 de julio de 1959 con el objetivo de buscar la independencia del País Vasco (Euskadi, en la lengua regional), ha asesinado desde entonces a casi mil personas y ha cometido decenas de secuestros y miles de extorsiones.
La primera víctima mortal de la banda fue un miembro de la Guardia Civil, José Pardines, el 7 de junio de 1968.