El senador por Bahoruco, Diego Aquino Acosta Rojas, ha tenido un pobre desempeño en el actual período legislativo, apenas ha participado en un proyecto de ley que introdujeron un grupo de siete legisladores al Congreso Nacional.
El proyecto que involucra a Acosta Rojas declara de prioridad nacional los sectores pertenecientes a la cadena textil, como colección y accesorios, pieles, fabricación de calzados y manufacturas de cuero.
El legislador sometió el proyecto junto a Heinz Siegfried Vielut, (PLD-Montecristi); Amílcar Romero, (PLD-Duarte); Andrés Bautista, (PRD-Espaillat); Rubén Darío Cruz, (PLD-Hato Mayor); Luís René Canaán, (PLD-Hermanas Mirabal) y Wilton Guerrero, (PLD-Peravia).
El proyecto donde aparece el nombre del senador por Bahoruco fue depositado en el Senado el 12 de abril del 2007, puesto en agenda el día 13, aprobado el 27 del mismo mes y año, y promulgada por el Poder Ejecutivo, el 4 de mayo del 2007.
Aquino Acosta es economista y periodista de profesión. Ha trabajado por más de 20 años en varias instituciones públicas, entre las que se encuentran la Superintendencia de Bancos y las secretarías de Finanzas y Obras Públicas.
El senador Diego Aquino es miembro de las comisiones de Educación Superior, Ciencia y Tecnología; Industria y Comercio, Zonas Francas, Modernización y Reforma, Obras Públicas y Presupuesto.
Paralelamente con su función como legislador, el senador se desempeña como Subsecretario de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, violando la Constitución y la Ley 120-01 que instituye el Código de Ética de los servidores públicos.
El artículo 18 de la Carta Magna expresa que los cargos de senadores y diputados son incompatibles con cualquier otra función o empleo de la administración pública. La Ley 120-01 prohíbe a los funcionarios tener dos empleos en las instituciones del Estado.
Conforme a la gravedad de la falta cometida por los servidores públicos, ordena amonestación privada y pública, suspensión sin sueldo por un mes, suspensión de sueldo por tres meses y cancelación definitiva del cargo.
La provincia Bahoruco, a la que pertenece el senador Diego Aquino Acosta, se encuentra al Suroeste del territorio dominicano, con unos 126 mil habitantes, y tiene como principales municipios, Las Clavellinas, Neyba, Galván, Los Ríos, Tamayo y Villa Jaragua.
Los habitantes de Bahoruco cuentan con escasos medios para ganarse la vida, viéndose empujados emigrar a España y a otros países de Europa.
Pese a introducir sólo una de las 152 iniciativas presentadas en el senado del 16 de agosto del 2006 al 15 de julio del presente año, Aquino Acosta disfruta de todos los privilegios con que cuentan los restante 31 senadores de la Republica Dominicana.
Además de un sueldo mensual de RD$125 mil recibe ingresos adicionales que llegan a los RD$100 mil mensuales.
Asimismo, recibe RD$50 mil mensuales por concepto de gastos de representación, viáticos RD$25 mil , dieta por cada sesión (dos a la semana) RD$3,500 y RD$2,400 por asistir a cada una de las reuniones de la comisión a la que pertenece.
A todo eso se suma un capítulo en el presupuesto del Senado para utilizarlo en programas sociales en sus respectivas provincias, llamado Fondo Mensual para la Gestión Provincia, Asistencia Social e Institucional de la Oficina Senatorial que alcanza RD$19 mil millones, RD$160 mil que se distribuye entre las 32 provincias.
Ese dinero es distribuido entre los senadores tomando en consideración la cantidad de habitantes que posee la provincia que representa, que oscila entre los RD$400 mil y los RD$900 mil mensuales.
Asimismo, para hospedaje para cada uno de los senadores, exceptuando al presidente y la vicepresidenta, el senado dispone mensualmente de RD$750 mil.
Además de seguir recibiendo esta cantidad de ingresos mensuales, sin presentar ninguna iniciativa a favor de su comunidad, el senador por la provincia Bahoruco estaría en el “paquete” de legisladores que aspira repetir en el Congreso.
Los pocos requisitos que exige la Carta Magna dominicana son para muchos ciudadanos los motivos por los que cada día que pasa más personas aspiran a disfrutar del privilegio de ser senador de la República por una de las 32 provincias del país.
El articulo 22 de la Constitución indica que para ser Senador sólo se requiere ser dominicano en pleno ejercicio de sus derechos civiles y políticos, haber cumplido 25 años de edad, y ser nativo de la circunscripción territorial que lo elija o haber residido en ella por lo menos 5 años consecutivos.