Los datos son espeluznantes, las estadísticas reflejan un aumento de la violencia contra la mujer en República Dominicana que debe llevarnos a la reflexión a todos y todas.
Algo hay que hacer. No nos podemos quedar de brazos ante esta situación.
En los últimos años hemos asistidos a un incremento alarmante de la violencia sexual y doméstica en Santiago y todo el país. Los estudios señalan que más de un 25 por ciento de mujeres entre 14 y 49 años han sufrido abusos y cientos de mujeres han sido asesinadas por compañeros o ex compañeros.
En nuestro país mueren semanalmente, según datos de la Procuraduría General de la República, un promedio de 4 mujeres víctimas de la violencia de género.
El cuatro por ciento de las mujeres fue forzado la primera vez que tuvo relaciones sexuales. El 18 por ciento tuvo la primera violencia sexual entre 15 y 18 años; y un 14 por ciento dijo haber sido violada entre los 10 y 14 años.
La mitad de las mujeres casadas o unidas informó que fue violada por su esposo o compañero (48%) y un amigo o conocido (10%).
Más de dos tercera partes de las personas que cometen violencia física contra mujeres entre 15 y 49 años son esposos/compañeros o ex esposos/compañeros.
Tal y como nos los expresan estas estadísticas y como bien lo expresa Noeleen Asier, directora ejecutiva de Fondo Ejecutivas de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM), “La violencia contra las mujeres destruye la vida de muchas personas, fragmenta a las comunidades, y constituye un obstáculo al desarrollo de las naciones”.
Ante lo que acontece en nuestra ciudad de Santiago sobre la violencia sexual y doméstica, se precisa que el Gobierno Municipal, el Síndico, que surja de las venideras elecciones congresuales y municipales, priorice el tratar y defender los derechos de las mujeres, la igualdad de genero, la lucha contra la violencia de la mujer y las niñas.
Desde ahora, los candidatos a Síndicos que presenten los partidos políticos, deben convocar a todas las organizaciones del municipio de Santiago que luchan a favor de la igualdad de género y la lucha contra la violencia de la mujer, para elaborar un Protocolo Municipal para la atención a las mujeres víctimas de la violencia de género y agresiones sexuales.
Sugerimos que ese Protocolo Municipal a favor de las mujeres debe contar con los siguientes enunciados:
Que el Gobierno Municipal garantice una atención integrar a las víctimas de la violencia
Unificar criterios de actuación de los agentes actuales frente a la violencia de género
Facilitar la coordinación de todos los servicios que territorialmente intervienen ante un caso de violencia, con el fin de mejorar la asistencia que prestan a las mujeres
Conseguir unas pautas de actuación homogéneas en todo el Municipio que redunden en beneficio de la actuación a las propias víctimas y a la puesta a disposición judicial del agresor
Sensibilización de las y los profesionales que reciben demandas de atención de mujeres víctimas de violencia, con el fin de que sean conscientes de la dimensión e implicaciones que conllevan
Hay que crear un marco social donde se promueva un modelo de convivencia compartida en una sociedad más libre e igualitaria para todos los santiagueros.
Debe el Gobierno Municipal crear un grupo de profesionales, de abogados, sicólogos y asesores, para aportar apoyo directo a las victimas en defensa, educación y protección a las víctimas de violencia doméstica.
La propuesta está hecha. Así se podrá eliminar el criterio generalizado de que “en la disputa entra marido y mujer, nada se ha de hacer”.
El autor es periodista
Frontera25_@hotmail.com
