La Organización Mundial de la Salud ha aprobado su segunda vacuna contra el cáncer cervical, en esta ocasión, un producto fabricado por GlaxoSmithKline, y eso permitirá a agencias de las Naciones Unidas y afiliados a adquirir millones de dosis de la vacuna para naciones pobres.
GlaxoSmithKline PLC informó el jueves en un comunicado que la aprobación de la vacuna ayudará a acelerar el acceso de Cervarix a nivel global.
La OMS aprobó previamente Gardasil, otra vacuna contra el cáncer cervical fabricada por Merck & Co. Ahora que hay dos vacunas contra el cáncer cervical a disposición de agencias internacionales, las autoridades médicas estiman que se podrían salvar decenas de miles de vidas.
Más de un 80 por ciento de las 280,000 muertes por cáncer cervical se registran en naciones del tercer mundo. En Occidente, el diagnóstico temprano y el tratamiento han reducido la incidencia de la enfermedad.
El año pasado, la Alianza Global para Vacunas e Inmunización (GAVI, por las siglas en inglés de Global Alliance for Vaccines and Immunization), señaló que era prioritario adquirir vacunas contra el cáncer cervical para mujeres de los 73 países más pobres del mundo. GAVI es una de las principales compradoras de vacunas para el mundo en desarrollo.
"Estamos muy ansiosos por ofrecer a mujeres en países en desarrollo esas vacunas, pues, sin chequeos tempranos, pueden ser más vulnerables al cáncer cervical", dijo Dan Thomas, vocero de GAVI.
En Occidente, la vacuna cuesta unos $360 por una dosis de tres inyecciones.
El vocero dijo que GAVI está conversando con empresas farmacéuticas, pero todavía se ignora si Merck & Co o GSK venderán sus vacunas a agencias a un precio más bajo.
