(Tercera parte y final)
Somos Juristas, no psicólogos. No estamos aptos para recolectar todas las variables objeto de una investigación de -grupos sociales informales- e interpretar académicamente los resultados de más de tres años de jugar pelota sábado tras sábado, para revelar los resultados que producen en nuestras vidas y en la labor que realizamos. Lo que sí es seguro, que todos los compañeros nos hemos compenetrado un poco más como personas, como jugadores y como miembros de una familia laboral que se llama Organización Nacional de Bufetes Colectivos.
Afortunadamente, el esfuerzo, la habilidad y la entusiasmo demostrado por nosotros en cada juego nos han permitido cosechar una proporción de victorias enormemente mayor que los desafíos perdidos. En la ciudad deportiva de la capital cubana, jugamos amistosamente contra cualquier equipo, no importa la edad, calidad o fama solo jugamos a ganar entregados con amor al Béisbol y si perdemos estudiamos nuestros errores, las debilidades y tratamos de no repetirlas, pero por sobre todas las cosas competimos como entidad laboral, presididos de una consciencia de quiénes somos y por qué nos hemos reunido. Merece significar que allí se nos conoce o se nos trata comúnmente por algún que otro asiduo jugador como el “equipo de los abogados” o escuetamente “Los abogados”.
A propósito de mencionar la importancia de que se practiquen deportes grupales en la empresa y la incidencia real de este fenómeno en la disminución del estrés laboral, véase en Gran Bretaña, Inglaterra, país del “primer mundo” por citar un ejemplo, el estrés profesional supone un gasto de entre un 5 por ciento y un 10 por ciento del Producto Interno Bruto. De esta forma entre las ventajas de practicar deporte colectivo entre miembros de un centro de trabajo vale mencionar las siguientes medidas divulgadas y aceptadas pacíficamente en la psicología, aplicadas a las relaciones laborales:
• Aumenta la producción.
• Se crea un concepto de lealtad, el empleado es más fiel a la compañía.
• Menos llegadas tardías.
• Se reducen las incapacidades.
• Menos corrupción.
• Se reduce la rotación de empleados, lo cual implica un costo muy alto
Otros autores proponen los siguientes beneficios ilustrados en la siguiente tabla:
Por supuesto estos resultados positivos en la conducta del binomio individuo-trabajador no son estáticos, ni absolutos y menos inalterables. De hecho, representan una serie de datos útiles recogidos y sintetizados por diversas investigaciones de campo que reflejan la relación ventajosa entre la práctica de deportes colectivos en centros laborales, en este caso todos fuera de nuestro país y los efectos individuales y colectivos favorables en función a la actividad de la producción y de los servicios.
La salud laboral está determinada por diversos factores como la motivación del trabajo, factores fisiológicos, antecedentes de enfermedades crónicas, factores sociales dentro de la empresa como el clima laboral, deficientes condiciones físicas de trabajo, falta de seguridad e insatisfacción con el pago. De esta manera, la realización de deportes solitarios o colectivos por miembros de la entidad laboral constituye solo un factor más que intenta paliar los efectos del estrés, del envejecimiento, la presencia de enfermedades oportunistas y otras condiciones negativas que atentan contra la mejor expresión práctica del objeto social de la entidad, pero que en comparación con otros factores de similar naturaleza ostenta una significación mayor que ha sido demostrada en la práctica y para la comunidad científica constituye una verdad mundialmente demostrada.
Por solo citar ejemplos ilustrativos, casi todas las grandes empresas cubanas tienen sus equipos deportivos e incluso organizan, cuando la dinámica de su tiempo laboral lo permite, competencias internas en disímiles disciplinas y juegos de conocimiento y movilidad entre todas sus dependencias. De hecho, en la propia ciudad deportiva de La Habana, podemos apreciar cada sábado juntas de pelota entre equipos de distintos organismos en los que resaltan ETECSA, HABAGUANEX, TURISMO, entre otros.
No siendo suficiente, hasta Dios está representado. Varias Iglesias cristianas emulan por un primer lugar en el torneo en el que rivalizan. Otras entidades pobladas de intelectuales y de jugadores de mayor edad se organizan, también oficialmente, para jugar softball, en este caso, hemos sostenidos encuentros amistosos con periodistas de prensa plana y resulta admirable apreciar su devoción por ejercitarse. También los domingos se efectúan choques de
pelota y softball con menor masividad.
Hasta aquí la historia y la actualidad del Equipo Provincial de Béisbol de Ciudad de La Habana, perteneciente a la O.N.B.C. Esperamos que el contenido de este material pueda entusiasmarlo a usted a la práctica de alguna actividad deportiva, haya documentado todos los beneficios personales, familiares y laborales de practicar ejercicios físicos sobre todo lo que significa dada nuestra condición de juristas o intelectuales en cualquier esfera y las continuas tensiones que recibimos a diario. Haga usted que cada día cuente, pero que pase con salud.
