Nueva York.- Existe un aumento significativo de los controles a las embarazadas para identificar si son portadoras del estreptococo grupo B (EGB), desde que las guías nacionales comenzaron a recomendar el chequeo universal en los últimos meses del embarazo.
El EGB puede pasar de la madre al bebé durante el parto. Es la causa más común de infección sanguínea y meningitis en los recién nacidos y una causa frecuente de neumonía en los bebés.
Entre el 10 y el 20 por ciento de los bebés infectados muere y muchos de los sobrevivientes padecen daño cerebral permanente.
La autora principal del estudio, doctora Melissa K. Van Dyke, de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), en Atlanta, dijo a Reuters Health: "Esta es la primera evaluación poblacional multiestadual de las recomendaciones publicadas en el 2002 de control universal del EGB".
Los resultados indican que "el screening universal se adoptó rápidamente después de las recomendaciones". El screening aumentó del 48 por ciento en 1998-1999 al 85 por ciento en el 2003-2004, según publicó el equipo en New England Journal of Medicine.
El 87 por ciento de las mujeres con EGB positivo, que tuvieron el bebé a término, recibieron antibióticos preventivos.
En general, la tasa de EGB de aparición temprana fue de 0,32 casos por cada 1.000 nacimientos vivos. Los bebés prematuros tenían una tasa más alta de enfermedad de aparición temprana que los bebés a término, aunque casi tres cuartos de los casos fueron en esos últimos.
Lo importante es que "se debería controlar a las embarazadas entre las semanas 35 y 37 de gestación, y aquellas con cultivos positivos deberían recibir profilaxis antibiótica en el parto", dijo Van Dyke.
"El screening prenatal es la mejor estrategia para prevenir la enfermedad por EGB de aparición temprana, pero los CDC están trabajando para identificar cómo podrían mejorarse las recomendaciones", añadió.
