Un selecto público se reunió en la Sala de Exposiciones de la Casa Club de Club Hemingway – Starfish Resorts en Juan Dolio, en ocasión del cóctel de presentación de la muestra “La Mirada Amorosa”, de los reconocidos artistas españoles Emma Grau y Pere de Ribot.
Tras haber expuesto sus obras con mucho éxito en las grandes capitales del mundo, ambos artistas manifestaron su agrado de presentar por primera vez al público dominicano, su más reciente producción.
Según confiesa Emma Grau, su colección: “Maternidades”, nace de su propia búsqueda interior tras la pérdida de su madre. En ella nos presenta su nueva y sorprendente obra en la cual convergen, casi superpuestos, el camino artístico y el camino interior, hasta desembocar en la conclusión de que “sólo el amor es el camino”.
Con respeto, delicadeza y mucha libertad interior, la autora recrea de forma muy sugerente, imágenes modernas y pinturas clásicas, entre las que sobresale la figura de la madre, y muy especialmente la Madre de Dios. Son cuadros llenos de vida que aspiran a transmitir la plenitud del amor que todo lo engloba. A través de la figura de la madre, nos habla del amor incondicional, de la alegría y la delicadeza, de la sensibilidad, la generosidad, la justicia y la paz que tanto anhela la artista en este mundo.
La nueva aventura estética de Emma Grau que ella misma califica como “muy íntima y personal”, fue presentada recientemente en Barcelona y Madrid. Son obras rebosantes de vida y luminosidad. La artista trabaja sobre fondos estampados que nos dan una sensación de abundancia. Son cuadros que parecen respirar por sí solos, seducen a primera vista.
En la obra de Pere de Ribot, hay un permanente “horizonte interior”, un horizonte que actúa como un imán sobre el espectador. De Ribot no lo pinta, pero ahí está su poderosa presencia ausente: El hombre como protagonista de un paisaje solitario, inquietante, disfrazado de Arcadia.
Pere de Ribot, deja la puerta abierta para que podamos transitarla en los dos sentidos: “Podemos plegarnos a la supremacía natural de las cosas, así como a su indudable espiritualidad, o podemos, también, sin embargo, reivindicar la supremacía épica del hombre, del individuo que anhela la soledad absoluta, aquella de la que disfruta únicamente el primer creador. Esta es, sin ir más lejos, la gran cuestión que ha preocupado siempre al hombre, la zozobra de ignorar, de no saber a ciencia cierta si existe una verdad más allá de él mismo”.
Los presentes compartieron agradablemente con los artistas y los propietarios del complejo. El acto estuvo amenizado con la música e interpretación del reconocido músico: Víctor Mitrov. Este evento se enmarca en un amplio programa, que tiene como objetivo el fomento de la cultura como parte del interés social de la empresa.
