Montecristi.- El Movimiento “Año Nuevo, Carretera Nueva”, que encabeza el padre Tony Ramos, suspendió hasta el mediodía de este lunes, la protesta pacífica que escenifican desde la madrugada, atendiendo el compromiso asumido por Obras Públicas de que a esa hora llegarían los equipos que trabajarán en la reconstrucción de la carretera Montecristi-Copey.
Como parte de la protesta, el comercio de Montecristi había cerrado sus puertas y cientos de personas bloquearon el puente sobre el río Yaque del Norte, y que comunica a Guayubín, Castañuelas y Montecristi.
Acordaron levantar el paro, con el compromiso de que los equipos de trabajos llegarán a las 12:00 de este mediodía a Montecristi; el gobernador provincial Alejandro Toribio, el general Paulino del Ejército, el general Reyna de la Policía, el síndico Necito Martínez y Jaqueline Zapata, Procuradora fiscal.
El padre Ramos advirtió a las autoridades de si a las 12:00 del mediodía de este lunes, los equipos de trabajos de Obras Públicas no están en Montecristi reiniciarán la protesta, la que aseguró cuenta con el apoyo de toda la provincia.
También prometió apoyar a Montecristi en el tipo de protesta que decida iniciar, si el secretario de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, no visita esa localidad el próximo miércoles. Afirmó que el funcionario los ha dejado plantados muchas veces.
“Ninguna de las calles de la provincia sirven, incluyendo los seis municipios y los cuatro Distritos Municipales”, dijo Ramos.
Hace poco, el obispo de Diócesis de Mao, Montecristi, monseñor Diomedes Espinal, denunció que las carreteras y caminos vecinales están en condiciones deplorables, lo que imposibilita a los agricultores sacar sus productos a los centros de mercadeo.
Deploró la falta de oportunidades que tienen los habitantes de los pueblos y comunidades de la Línea Noroeste y abogó porque a esa subregión se les preste mayor atención.
El prelado católico manifestó que a los pueblos del Noroeste solo les queda albergar la esperanza en que algún día los gobiernos se preocupen más por la solución de los problemas que afectan a sus comunidades.
También reveló que el desempleo es latente en esa zona, lo que impulsa a muchos de sus pobladores emigrar a las grandes ciudades dominicanas en busca de mejores condiciones de vida.
El obispo manifestó que esas son algunas de las problemáticas que afectan al Noroeste integrada por las provincias de Valverde, Montecristi, Santiago Rodríguez y Dajabón.
