TUCSON, Arizona.- Al igual que un niño con mucha energía, lo primero que desea hacer el dominicano Ubaldo Jiménez todas las mañanas es tomar una pelota, un guante y jugar atrapadas.
Los días entre aperturas son emocionantes para el as de los lanzamientos candentes de los Rockies de Colorado.
Los recesos entre temporadas serían terribles para Jiménez si no jugara durante el invierno en su natal República Dominicana.
"Quisiera no parar", expresó Jiménez, quien tiene una voz suave. "No me gusta ser flojo".
Nadie podría acusarlo de eso. Jiménez lanzó al menos seis entradas entre las 25 aperturas seguidas que establecieron marca de la franquicia en la campaña anterior, con lo que ayudó a los Rockies para clasificarse como comodines en la Liga Nacional.
Una vez que recibe la pelota, no quiere soltarla.
Jiménez ha sido designado el abridor del equipo para el primer partido de los Rockies el 5 de abril en Milwaukee, un honor que lo anima.
"Tengo que continuar entrenando fuerte", expresó Jiménez, de 26 años. "No puedo cambiar en nada".
Aunque Jiménez lanzó la temporada pasada la cifra más alta del equipo con 218 entradas, su brazo jamás acusó desgaste.
Efectuó 3.570 lanzamientos en el 2009, la segunda cifra más alta de la Liga Nacional después de los 3.614 de Adam Wainwright, de los Cardenales de San Luis.
