La incertidumbre es muy difícil de llevar, sobre todo en el terreno sentimental. Aunque no te lo diga con palabras, puedes descubrir si le interesas o no fijándote en las señales.
“¿Le habré gustado?“, “¿Se lo habrá pasado bien?”, “¿Me llamará?”… Son algunas de las preguntas que todos nos hacemos (algunos con insistencia enfermiza) después de la primera cita.
Bien, puede que ahora la agonía sea menor. Incluso puede que desaparezca por completo.
Investigadores de la universidad de Lancaster, en Reino Unido, están trabajando en un ‘detector de emociones’, que aunque de momento se encuentra en fases experimentales servirá para analizar funciones corporales como latidos cardíacos, rubor, sudor o la dilatación de las pupilas; todo ellos signos de enamoramiento.
Se trata de un dispositivo que se acopla al móvil y podría indicar si una persona te encuentra atractivo/a en una primera cita.
¡Guau! Esto sí que es un gran avance, ¿no crees? Así podrás darte cuenta si la persona que tienes delante se siente atraída por tí o si, en realidad, está valorando seriamente mandarte directamente a la “friendzone”.
Además, el prototipo cuenta con un audífono y una cámara de vídeo, y sus inventores aseguran que ya hay varias compañías cinematográficas que se han interesado por el uso del aparato.
“Detectar las emociones será una meta en las comunicaciones del futuro”,aseguran los investigadores.
No obstante, aún falta un tiempo para que este increíble cachivache pase a alcanzar el estatus oficial de ‘Polígrafo del amor’, ya que según el profesor Paul Coulton: “esta herramienta ciertamente existe pero promete crear algunas discusiones serias”.
Según nos cuenta Coulton para este trabajo “especulativo” se basaron en el filme de culto ‘Blade Runner’, la mítica película de ciencia ficción dirigida por Ridley Scott, estrenada en 1982, en donde existía un aparato con funciones similares: la máquina “Voight-Kampff”.
En la película, basada en la novela ‘¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?’, de Philip K. Dick, se utiliza una prueba de empatía (el test Voight-Kampff) para descubrir a los replicantes.
Una especie de examen, muy parecido al que quieren utilizar ahora, que pretendeaveriguar la “humanidad” del sujeto entrevistado. Por eso también se utiliza una cámara que registra y evalúa el movimiento de los ojos, así como el tamaño de las pupilas en cada respuesta.
Aunque el invento pueda parecerte muy frívolo y superficial, o incluso darte un poco de miedo (¡OMG! Dónde vamos a parar si quedas con alguien y se presenta con semejante artilugio camuflado en su smartphone) lo cierto es que la intención del equipo es que este dispositivo sirva para que la gente medite acerca de las implicaciones éticas de usar y controlar las emociones de otros.




