Santo Domingo, RD. – Las intensas lluvias provocadas por la tormenta tropical Melissa en los últimos días han dejado al descubierto las graves deficiencias del sistema pluvial del Distrito Nacional y el gran Santo Domingo generando inundaciones repentinas, caos vehicular y afectaciones en múltiples sectores de la capital.
Calles convertidas en ríos, viviendas anegadas y el colapso del tránsito urbano fueron escenas comunes desde las primeras horas del fenómeno atmosférico. Barrios como Villas Agrícolas, Cristo Rey, Ensanche La Fe, Capotillo ,Villa Juana, así mismo resultaron afectados los municipios de Villa Mella, Santo Domingo Oeste y Este, todo con el común denominador el cúmulo desechos sólidos que tapa los imbornales.
Las autoridades del Ayuntamiento del Distrito Nacional y del Centro de Operaciones de Emergencias (COE) informaron que se mantienen en alerta amarilla varias provincias, mientras brigadas del cabildo trabajan en el retiro de escombros y desechos sólidos que agravan el problema de acumulación de agua.
Expertos en urbanismo advierten que la situación no solo responde a la intensidad de las lluvias, sino también a décadas de crecimiento desordenado y ausencia de planificación urbana. Señalan que el sistema de drenaje de la ciudad, diseñado hace más de 50 años, resulta insuficiente ante el actual volumen de precipitaciones y la expansión del cemento sobre áreas que antes servían de desagüe natural.
El fenómeno meteorológico, además de provocar daños materiales, ha reabierto el debate sobre la urgencia de una intervención integral del sistema pluvial de la capital, con inversiones que prioricen la infraestructura sostenible, la educación ciudadana y la correcta disposición de residuos.

Aunque se reconoce el esfuerzo de las autoridades, para preservar vida también hay que saber que aún el país falta mucho por hacer para resolver el problema del drenaje.




