El presidente de la Federación Nacional de Transporte La Nueva Opción (Fenatrano) y representante de la Federación Sindical Mundial, capítulo dominicano, Juan Hubieres, denunció este martes que el expresidente Leonel Fernández está gestionando ante el presidente de la Suprema Corte de Justica (SCJ), Mariano Germán Mejía, la puesta en libertad de Arsenio Quevedo, subdirector de la Omsa, y de otros sicarios vinculados al asesinato de al menos 12 choferes.
De acuerdo a lo expresado por Hubieres, el expresidente Fernández encargó para tales fines al exprocurador general de la República, Radhamés Jiménez, quien ya ha visitado a Germán Mejía para tratar el tema.
En ese sentido, el dirigente sindical solicitó al presidente de la CSJ, a los funcionarios del gobierno y a otras personas vinculadas al Partido de la Liberación Dominicana (PLD), a suspender sus maniobras para favorecer a los sicarios de la banda criminal que ha asesinado a más de una docena de personas, entre estos el abogado Juniol Ramírez.
Hubieres aseguró que en los aprestos para libertar a los principales cabecillas de esa banda de sicariato, Arsenio Quevedo (El Cinqueño), Erickson de los Santos Solís (Ney) y otros, están el presidente de la SCJ, Germán Mejía, el exprocurador Jiménez, el canciller y presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Miguel Vargas Maldonado y el expresidente de la República y presidente del PLD, Leonel Fernández, así como personeros vinculados al presidente Danilo Medina.
El exdiputado adujo que estas personas buscan que esos sicarios sean libertados para que salgan a las calles a realizar las mismas acciones que han venido ejecutando desde el 2007 en distintos puntos de la provincia Santo Domingo, dejando a su paso varios muertos y heridos con la protección de la Policía Nacional, en esos momentos.
El último de los crímenes de esa banda de sicarios, que es conocido aunque con otros actores, fue el horrendo asesinato del profesor universitario Juniol Ramírez, que al igual que los demás viene desde las entrañas mismas de la Oficina Metropolitana de Autobuses (OMSA), de la cual Quevedo es subdirector.
Entre los muertos por los que son juzgados figuran Mateo de Jesús Nieves, de la Federación de Transporte Peña Gómez (Fenatrapego), asesinado el 15 de enero de 2015, en la avenida Duarte esquina París, así como Ángel Javier y Overnis Guerrero (Limpiabotas), ocurrida el 17 de enero del mismo año.
Hubieres recordó que luego de la muerte de los transportistas, ocurrida los días 15 y 17 de enero de 2015, denunció que el PRD había solicitado al presidente Medina la puesta en libertad de Erickson de los Santos Solís.
La solicitud estaba entre los puntos propuestos para la firma del pacto electoral, que finalmente se ejecutó entre el PLD y la organización que dirige Vargas Maldonado.
La sentencia, en materia de Hábeas Corpus, dictada por la jueza Awilda Reyes Beltré se produjo el 30 de octubre de 2015. En ese Hábeas Corpus el entonces regidor fue defendido, entre otros, por varios abogados del PRD, entre ellos el hoy fenecido Salim Ibarra, quien a la sazón era consultor jurídico de esa organización política.
Hubieres precisó que los aprestos para la libertad de Ney y Quevedo se han reanudado con la participación del exprocurador General de la República, Radhamés Jiménez, quien visitó al presidente de la Suprema Corte de Justicia, con un encargo de Fernández, para que le busquen una solución definitiva al caso del subdirector de la OMSA, quien es el que financia las acciones que lleva a cabo la banda de sicarios.
El dirigente de los transportistas puntualizó que son cientos de pruebas que hay para condenar a estos individuos por la comisión de esos crímenes, entre las que figuran copias de cheques a nombre del exregidor, uno de los cuales fue emitido un día antes de los asesinatos de Javier y Guerrero, y un día después de la muerte de Mateo, o sea el 16 de enero de 2015, por un valor de 100 mil pesos, del banco BHD, con el número 1443.
Otras pruebas contundentes que demuestran la participación directa de todos los que son juzgados por esos crímenes son los cientos de cruces de llamadas antes, durante y después de las muertes de los tres hombres y un mapeo, cuyos documentos figuran en el expediente acusatorio.
Manifestó que el exregidor de Pedro Brand era el brazo operativo de esa criminal banda de sicarios, pero que la participación de Quevedo era la de financiar las acciones de ese grupo, como está demostrado en las nóminas de Unatrafin, la Federación que dirige el subdirector de la OMSA, en la cual figuran todos los que participaron en esos asesinatos.
Hubieres advirtió que la salida de la cárcel de Ney, El Cinqueño, y los demás implicados sin pagar a la sociedad todos esos crímenes pone en peligro la vida de los familiares de los asesinados que han llevado a cabo el proceso, sin desmayar, con valentía y decisión para que la justicia finalmente dicte una sentencia acorde con los hechos cometidos por estos.




