Río de Janeiro.- Brasil adoptó hoy un nuevo sistema de clasificación hotelera, con criterios más exigentes para los considerados cinco y cuatro estrellas, con el fin de preparar al país para el elevado flujo de visitantes que recibirá durante el Mundial de fútbol de 2014 y los Juegos Olímpicos de Río en 2016.
El llamado Sistema Brasileño de Clasificación de Medios de Hospedaje (SBClass) fue anunciado hoy por el ministro de Turismo, Pedro Novais, en un acto en Río de Janeiro al que acudieron los dirigentes de las principales patronales del sector.
«Se trata de un sistema innovador que va a preparar al país para recibir los turistas del Mundial de 2014 y de los Olímpicos de Río de Janeiro», afirmó el ministro.
Pese a que mantiene la tradicional clasificación de hoteles en la escala de entre una y cinco estrellas, el nuevo sistema impone criterios más rigurosos para los establecimientos que aspiran a las mejores calificaciones.
El sistema, además, permite que hoteles que no tienen las mejores calificaciones en criterios como infraestructura puedan compensarlo ofreciendo otros servicios, incluyendo algunos sustentables, como la colecta selectiva de residuos, o la reducción del consumo de agua y energía.
«Un hotel que no alcanza el número deseado de estrellas por tener una piscina considerada pequeña puede compensar esa deficiencia en la nueva clasificación con la oferta de servicios de calidad», explicó el presidente de la Asociación Brasileña de la Industria de Hoteles de Río de Janeiro, Alfredo Lopes.
Los nuevos criterios del SBClass están especificados en un decreto ejecutivo firmado hoy por el ministro y que fue elaborado con base en un estudio comparativo de los criterios exigidos por 24 países.
Según Novaes, el sistema permitirá que los hoteles brasileños sean calificados con estándares internacionales en lo referente a infraestructura, prestación de servicios y prácticas de sustentabilidad.
De acuerdo con Lopes, la clasificación inicialmente no será obligatoria pero será un diferencial para los hoteles que quieran aumentar su competitividad, ya que les permitirá figurar en la lista oficial de establecimientos recomendados y utilizar el logotipo del Ministerio de Turismo en su publicidad.
El hotel que desee recibir la nueva calificación, que tendrá validad por tres años, podrá solicitarla ante una comisión de técnicos del estatal Instituto Nacional de Metrología, Estandarización y Calidad Industrial (Inmetro).
Las posadas y hoteles que se sometan a la nueva clasificación, que el Gobierno calcula entre 7.000 y 8.000, también tendrán ventajas como un mayor acceso a créditos oficiales para las obras destinadas a reformas y ampliaciones.
El presidente del Inmetro, Joao Jornada, explicó que, tras la inspección inicial, los fiscales del instituto podrán realizar visitas sorpresa a los establecimientos para garantizar que mantienen la calidad de los servicios prestados. EFE