A lo largo del tiempo y de forma constante, San Pedro de Macorís ha visto nacer grandes promesas del béisbol, que por la constante producción, en cantidad y calidad, tiende a ser visto como algo normal algunas veces y otras como el ultimo fenómeno del cual otro igual no aparecerá jamás.
Basta sólo citar los casos de George Bell hasta Sammy Sosa, Alfonso Soriano y Robinson Canó.
Pero la cosecha sigue y de repente aparase un bisoño con igual o mayor potencial que los anteriores como Miguel Ángel Sanó, del cual todos pensaron que pasaría un largo trecho de tiempo hasta la aparición de otro jugador con iguales condiciones físicas y habilidades para convertirse en una súper estrella del béisbol oriundo de la provincia.
Pues bien, tal como un valioso tesoro, aparece desde el Ingenio Angelina, la tierra de Pedro Gonzales, Santiago Guzmán, Rafael Ramírez, Mariano Duncan y otros, un joven de un fornido y atlético cuerpo, que al asomarse al campo deportivo a realizar su rutina diaria causa asombro.
No acercamos a él y de inmediato le preguntamos:
-Hey, cuántos años tienes?
-17 señor, fue la respuesta
-De qué barrio eres?
– Del Ingenio Angelina, nos contesta
– Cómo te llamas?
-Kelvin Vásquez,
"Pero si usted espera que termine la práctica seguimos hablando", y así lo acordamos.
Luego e transcurrir algo mas de tres horas y tras una intensa jornada de entrenamiento, nos dispusimos a conversar con aquel jovencito, de escasos 17 años, que mide 6 pies 4 pulgadas de estaturas con un peso corporal de 190 libras de puros músculos, que se desempeña con eficacia en el campo corto como en la defensa del tercer cojín y puede exhibir un potente brazo en ambas posiciones. Pero el gran espectáculo lo monta al momento de realizar sus prácticas de bateo, donde le pega con autoridad a cualquier lanzamiento sin importar si son bolas rápidas o lanzamientos rompientes, lo cual se convierte en una gran exhibición de batazos dirigidos hacia todos los ángulo del terreno con una fuerza descomunal, gran destreza y maestría, lo que parece ser una reedición del talento de Rico Carty y Mateo Alou, combinados en un solo bateador, a la vez que es capaz de generar una velocidad pasmosa de home a primera base
Decidimos más que conversar con el, escucharlo decir.
"Bueno mi don, yo nací en el ingenio Angelina y crecí admirando a Derek Jeter, y me dije que un día después que él se retire yo voy a jugar en el campo corto de cualquier equipo de Grandes Ligas o tal vez en la tercera base, lo mismo que Alex Rodríguez, lo cual sería fantástico para mi, ya que él es uno de mis jugadores favorito".
Ahí intervenimos y le preguntamos y si por cosa del destino no logras firmar. El ripostó diciendo que "me voy a la universidad a estudiar ingeniería electromecánica, pero con la ayuda de Dios, yo voy a firmar para lograr el sueño de jugar en Grandes Ligas y conseguir hacer una escuela en el ingenio Angelina y también instalar una industria allí para que la gente trabaje y se gane su sustento diario".
En ese momento interviene Miguel Sutten, su entrenador, quien se va en elogios al talento y las condiciones físicas de Kelvin, quien por estas condiciones humanas, educación y humildad que lo caracterizan tiene un futuro brillante en el beisbol.
Ya que el Joven Kelvin Vásquez tiene una disciplina y ética de trabajo similar a súper estrellas del calibre de Albert Pujols y Julio Cesar Franco, junto a las condiciones atléticas que exhibe, lo perfilan como la próxima estrella de la gran constelación de peloteros petromacorisanos.
